Es el proceso educativo para el desarrollo de competencias emocionales (en su conjunto se le llama Inteligencia Emocional) que contribuye al desarrollo integral de las personas con el fin de enfrentarse a la vida, tanto en sus aspectos positivos como negativos. Educar para las emociones podría decirse que es educar para vivir bien.
La educación emocional es una capacidad que se aprende y que tiene por fin aumentar el bienestar personal y social. No depende exclusivamente de los maestros, aunque en el colegio se contribuye de manera decisiva a ello, siempre y cuando se cuente con familias fuertes, comprometidas y que trabajan diariamente por convivir de manera pacifica, respetuosa y comunicativa.
La Educación emocional tiene 4 dimensiones:
¿Qué puedo hacer para educar emocionalmente?
Observa el siguiente gráfico y evalúa en que acciones debes mejorar. No existe la educación emocional perfecta, pero sí se pueden buscar maneras cada vez más enfocadas en el diálogo y menos en la violencia, formando seres seguros, con autoestima y motivados por el respeto más que por el miedo.
(Adaptado de Collell, J. & Escudé, C. 2003. L´educació emocional. y www.educayaprende.com)
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